No sólo puedes, debes de hacerlo, ya que el ejercicio ayuda a disminuir el dolor y la rigidez, mantiene las articulaciones en movimiento, aumenta o mantiene la fuerza muscular y aumenta la resistencia, sin embargo, se debe elegir la actividad correcta para no lastimarse durante estas actividades.
Son tres los tipos de ejercicios que se usan para ayudar en la artritis:
*Los ejercicios de elongación o de amplitud de movimiento ayudan a mantener el movimiento de las articulaciones y a aliviar la rigidez, en su mayoría se refiere a ejercicios conocidos como de calentamiento, estirar articulaciones y aplicar un poco de resistencia con nuestro cuerpo.
*Los ejercicios de fortalecimiento ayudan a mantener o a aumentar la fuerza muscular, estos se refieren a los encaminados a definir nuestros músculos como las sentadillas o las abdominales, estos deben ser practicados por aquellas personas que no molestan tanta molestia en la flexión de sus articulaciones, de igual forma se puede agregar peso, pero no demasiado, esto para crear resistencia y trabajar los músculos, por ejemplo, elevaciones laterales de los brazos sosteniendo pesas de 2 kilos..
*El ejercicio aeróbico ayuda a mantener la resistencia, a fortalecer el corazón y los pulmones y a disminuir la fatiga, además de "aceitar" las articulaciones para combatir la rigidez. Entre estos ejercicios se encuentran el caminar; andar en bicicleta; bailar, y hacer ejercicios en el agua
Consejos:
Puede darte cuenta cuándo haz hecho demasiado ejercicio si comienza a tener más dolor que lo usual al realizar los ejercicios o si continúa sintiendo dolor dos horas después de haberlos terminado.
Verifica con tu médico cuáles son los mejores ejercicios para ti, con qué frecuencia debes ejercitarte, cuántos ejercicios debes hacer y cómo regular tu medicación para aliviar el dolor y la rigidez durante el ejercicio.
Solicita a tu médico que te canalice con un fisioterapeuta para tener mejores resultados.