No hay una prueba específica para diagnosticar la artritis. El diagnóstico depende del tipo de artritis que el médico sospeche e incluye el examen del paciente y su historial clínico. A veces se necesitan una gran variedad de pruebas para llegar a un diagnóstico seguro.
Por lo regular el médico le hará un reconocimiento físico, examinará las articulaciones y los músculos adoloridos y escuchará una descripción de los síntomas y su gravedad. Con ello, éste se hará una idea de lo que está ocurriendo. Pero en ocasiones, el doctor requerirá información que sólo la puede proporcionar el análisis de fluidos y tejidos corporales. Cuando se necesita confirmar el diagnóstico, monitorear el avance de la enfermedad, la efectividad de un medicamento, o determinar si los fármacos que toma están produciendo efectos secundarios potencialmente peligrosos (aunque no evidentes), para cualquiera de estos casos, le ordenará exámenes de laboratorio.
Efectuando el diagnóstico
Aunque los análisis de laboratorio no se necesitan para todos los tipos de artritis, son importantes para verificar y confirmar la presencia de algunas enfermedades. Si sus síntomas y el examen físico sugieren artritis reumatoide, síndrome de Sjögren, enfermedad de Lyme o alguna otra forma de artritis inflamatoria, las pruebas sirven para que el doctor confirme el diagnóstico.
Existen cuatro reglas generales que recordar acerca de las pruebas:
- Ninguna prueba es perfecta. A veces, las personas sanas tienen análisis cuyos resultados son anormales, y las personas con artritis pueden tener análisis con resultados normales.
- Las pruebas no determinan el diagnóstico o el tratamiento. Antes de realizar cualquier examen, su médico debería tener una buena noción de lo que está afectando a las articulaciones. Los análisis ayudarán a reducir cualquier incertidumbre pendiente.
- En general, las pruebas diagnósticas no se deben repetir una vez que se ha confirmado el diagnóstico. (Quizás se repitan para verificar la eficacia del medicamento o los efectos colaterales).
- El proceso diagnóstico se realiza sobre la base de la historia clínica y el examen físico, las pruebas son secundarias.
Recuerde:
- Es muy importante que el médico llegue al diagnóstico correcto ya que existen diferentes tipos de artritis y, frecuentemente, el tratamiento varía de acuerdo al tipo de artritis.
- El diagnóstico y tratamiento temprano a menudo pueden ayudar a controlar los síntomas y a retardar o prevenir el daño en las áreas afectadas.
- Un médico o reumatólogo que tenga conocimientos y experiencia en la artritis y enfermedades asociadas generalmente podrá realizar el diagnóstico.
- En la artritis, no siempre es simple o fácil llegar al diagnóstico correcto, y quizás lleve tiempo e implique muchas consultas al médico.
- En los primeros estudios, algunos tipos de artritis pueden asemejarse entre sí y causar síntomas similares. Del mismo modo, algunos tipos de artritis pueden parecerse a otras enfermedades.
- Es probable que el médico desee observar sus síntomas durante un tiempo para determinar si usted tiene artritis, y si así fuera, para diagnosticar específicamente el tipo de artritis que usted padece.